¡Hola de nuevo! Hoy traemos una receta de las que se guardan en “Favoritos” 😍(con mayúscula) y se rescatan una y otra vez porque siempre sale bien y gusta a todos. Las magdalenas de Aragón son súper jugosas, gracias a la adición de leche (que también podéis cambiar por vegetal) y al reposo en crudo antes de hornear.
Me encanta preparar la masa por la noche, dejarla en la nevera bien tapada y hornearlas por la mañana para tener un desayuno de 5 estrellas. Además, si os sobran, las podéis congelar una vez tibias y se conservan perfectamente un par de semanas.
Que no se diga que es por la calor, encended el horno y ¡a
por ellas!
Nos vemos en la siguiente receta, ¡hasta pronto!
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