Tengo que reconocer que me encantan los cítricos. Ahora que viene la época de las naranjas, os propongo una receta para aprovecharlas al máximo.
Estas magdalenas tienen una masa extraordinariamente esponjosa y una textura delicada y ligera. Además, podemos variar la receta original a nuestro antojo obteniendo un resultado similar: sustituir el aceite de oliva por mantequilla, cambiar el tipo de mermelada, utilizar ralladura de limón en vez de naranja, variar las semillas por lino dorado o mezclas de semillas preparadas, etc. Como se dice: ¡el límite es nuestra imaginación!